No hicimos el nombre.Tampoco el logo. Pero convertimos un restaurante nuevo en una marca que habla, inspira y engancha.

Diseñamos la estrategia de comunicación, marcamos el tono, bajamos el concepto y generamos contenido que huele, suena y sabe a lo que se sirve en mesa.

Porque si hay una historia, hay una marca. Y si hay marca, hay estrategia.

Qué hicimos:

Estrategia de marca:

Posicionamiento emocional, tono verbal, universos temáticos y activaciones adaptadas a la experiencia Uluwatu.

Marketing y contenido digital:

Planificación de contenido, calendarización de lanzamientos y comunicación sensorial en Instagram y Meta.

Producción audiovisual:

Fotografía, reels, stories y vídeo emocional.
Todo lo que no se puede contar con palabras, lo contamos con luz, sonido y atmósfera.

Dirección de comunicación y campañas:

Del primer teaser a los rituales semanales. Cada pieza cuenta parte de la historia.